martes, 16 de noviembre de 2010

No hagas nada y el mal
tampoco sabrá muy bien
qué hacer.

2 comentarios:

diana moreno dijo...

qué interesante blog. me meteré alguna que otra vez a toparme con esta poesía lacónica-evocadora. un saludo!

Abraham dijo...

Gracias.

Cada día te aguarda una bienvenida.