viernes, 15 de marzo de 2013

Contando con lo humano

Nos da la libertad
la gota que colma el vaso
que dura sólo un momento.

-prendere

No hay crueldad mayor que la de comprender.
Y comprender es humano, por eso no pongo trabas
a ese deseo despiadado de saber del ser cruel
humano. Pero atentos
y prontos al olvido, o a la opción
de que lo sabido se desvanezca
y se convierta de pronto
en algo aún incomprensible
aún nuevo aún
ya milagrosamente no
aquello que comprendimos.
A pesar de la admirada crueldad,
las súbitas bendiciones de la ignorancia,
transformación divina.
Cuerda que me sostiene.
Escala por la que me entretengo.
Andamio de mis juegos o
árbol de mi destrucción.
Vendaval que no fuiste
ni semilla ni hoja.
Ojo de ciclón
donde ahogar estos sueños.
Espero que me nombres porque
obediente me llamaste sujeto de esperanza.
Pero este idioma es un nudo de timidez eufórica.
Me recorren fluidos innombrables
que no sé a dónde van, dudo
ni siquiera que tengan
dirección o sentido.
Voy a volar sobre esta alfombra de espera
entre el torbellino en fuga todo don;
pero sospecho que sea sólo una fantasía.