martes, 4 de julio de 2017

Sirenas

Ya los rumores no corren
ocultos como antes como ratas.
Han abandonado la bodega del barco,
el que navegaba los océanos de la historia.
Copulan como decían que hacían los vikingos,
a la vista de todos, en plena invasión,
y es comercio y rapiña y ruina y negocio.
Los rumores tienen el mismo traje
que la tradición, las reivindicaciones.
Duermen confiados en las calles.
Ríen desinhibidos en las casas.
Legislan, ponen orden.
Los rumores tienen el mismo traje
que la tradición, las denuncias.
Amenazan con hacernos a nosotros invisibles,
en estos tiempos, en estos pasos.