viernes, 17 de enero de 2014

Sin apego al delirio

Hablábamos los dos
de una tercera posición distinta
al objeto y distinta del delirio
tomado como original de mirada.
Una posición que no es tal pues no es
objeto ni lugar de partida, esfuerzo
sin pose por salir de pretendida
dialéctica o fe o ingenuidad.
Pero es un secreto, no se me
permite hablar de ello. Son
estas traicioneras palabras 
nunca mías.