viernes, 11 de abril de 2014

Me entregas envuelto y prestado
todo cuanto tiene que ver con la intención.

Desplazamiento lateral

Sentirse atrapado, debiéramos pensar,
es saberse envuelto por un trapo.
Nuestra piel, por ejemplo, es un trapo.
Una esponja. Nuestro estómago, nuestro
vestido, nuestro lugar son trapos. Como lienzos
podemos escribir sobre ellos, pero el lenguaje
es un trapo que arrugamos hasta hacerlo hueso.
Y así un relato, un viaje, un vuelo,
un trapo igual que el sonido melódico de una flauta
que hiere nuestro corazón, una flauta de hueso
en nuestro corazón de trapo y su suspiro.
El deber, amigo, es un trapo. El pensar, otro trapo, amigo.
Habitas una prisión; pero si intentas
definirla, la prisión escapa de sí misma.
Tú quedas, en cambio, atrapado en otro hábitat.
La sombra como compañero.
La sombra como tono oscuro.
La sombra como ficción.
La sombra lleva al frescor.
La sombra lleva al miedo.
La sombra lleva a la confusión.
Alejandro y Bucéfalo se hicieron amigos
por una sombra.
Conquistaron el mundo
por una sombra.
Construyeron la Historia
por una sombra.
Aquí fluyen escritas sombras de las sombras.