martes, 16 de noviembre de 2010

Palabra por palabra

Recuerda que tu trabajo es un castigo por querer sobrevivir.
Tu trabajo es un recuerdo que quiere sobrevivir por un castigo.
El castigo quiere sobrevivir por que trabajes tus recuerdos.
Por querer que castigues sobreviven los recuerdos del trabajo.
Sobrevive los castigos que recuerdan el trabajo de tu querer.
Desde tiempos inmemoriales el mundo se desmorona
por ti
hacia un eterno monumento colosal de su derrumbe.
No hagas nada y el mal
tampoco sabrá muy bien
qué hacer.

Un caos que esperaba

Intentabas convencer al caos para que
estuviera todo tranquilo. Tú mismo eras
un caos que esperaba en el rincón de sí mismo
los detalles más íntimos del violento cosmos de intenciones.