martes, 15 de octubre de 2013

Posibilidad de elección

Vivo encerrado en un arpegio y sus leyes
de Bach si acaso hubiera
posibilidad de elección.
¿Dicen que suenan aún vestigios del viento,
que se curva la luz,
que la ciudad tiembla de intenciones?
Tú me has llenado de tantas ausencias.
El cuerpo es una prisión.
El placer es una prisión.
El deseo es una prisión que viaja.
Vivo al borde inquieto del precipicio de mi máscara.
Y esta idea de que llego tarde a mi propia vida
no sé de quién la tomé prestada.
Querer será pronto una obsesión devolvérsela.
Pregunten por ahí y si tienen noticia denme aviso:
no saben cuánto es para mí necesario.