sábado, 27 de junio de 2015

Estudio de la venganza

Añoras a un hombre que aspira a la venganza.
Obsérvalo: él
siente hambre y se venga con la comida,
se sacia y se venga con el hambre.
Utiliza la ropa para vengarse
del calor y la desnudez
para vengarse de obligaciones y de esfuerzos.
Llama bárbaros a los que piensan
con un lenguaje diferente, una razón,
un odio y un dios que exige otras normas.
Luego, mientras se acuerda, construye
su venganza puliendo su civilización,
sus ritos y sus normas: sudores racionales
y otros platos de bien servidos al tiempo.
Al asesino lo llevaría a la extinción.
Al mal lo castigaría eternamente.
Me hace a mí mismo pensar en la violencia,
imaginar al detalle su hermosa soledad,
y yo me vengo de él, creando personajes
del todo
posibles.