Véase la enunciación como
un índice al momento, y así
cualquier arte.
Los matices nos golpean, nos impregnan, nos resbalan.
Estoy de los contrarios hasta las narices.
Tenía que decirlo y elevarlo
a la categoría de poema inmaculable.
Hay otras formas distintas del odio
para hacer permanecer las cosas
no necesariamente mejores.