miércoles, 17 de agosto de 2011

Que en ella radique que se una la singularidad
a lo universal.
Y en tan general ceguera nos impida saber
ni yo, ni sujeto, ni universal, ni objeto, ni ceguera.
La belleza es, pues, el puro y perfecto impedimento.

Petición y ruego

Te amo cuando mi amor
me impide creer en ti.
Impide, tu amor, en mis actos
la ejecución de una fe despiadada.

La veracidad de las flores

Mientras con la belleza en los labios
degollamos el ganado de la ciudad,
la higiene de los campos. ¡Qué sabrá
la tierra de la eficacia de la sangre
o de la voracidad de las flores!
Este atardecer será un acto de perdón.

Imaginación

¿En qué situación me permito ejecutar la belleza?