martes, 28 de mayo de 2013

Al saco de mis palabras prohibidas, de mis debilidades permitidas, de mi seguro desliz.
El futuro está garantizado. Los matices en el aire.
Siempre
sucede y es
maravilloso.
Si no supiera
hablar desde mi
pensamiento volaría.
Hay saludos
que suenan a despedida y otros
a sueños de adiós muy reencontrados.
No tardes cuando decidas
dejarte caer
en el tiempo y menos
en el lugar que según
dicen vamos
dejando detrás en sucesivas
espirales de suelo y pasos.
Si mis pies y los tuyos
habitan la obsesión de este mismo planeta.