sábado, 25 de abril de 2015

Dientes

Sales de casa mascullando regresos.
Ahora que no estás, te retengo entre dientes.
No alcanzo a distinguir mi memoria y mi boca.
Si el deseo es un labio que duele
aprieto los momentos y los hago sonar.
Separo entre los dientes aquellas ilusiones.

Espera

Toda distancia empieza en tu última palabra
y termina febrilmente en una única
minúscula mota de perdón.
En el silencio se ara, germinan y florecen
y se siembran distancias. Imagíname
un verano pensando en la cosecha.

Nieve

En este suelo donde yunque del sol
hace estallar la luz en amapolas
la curva de los campos de trigo
verdes aún, humanos, casi míos,
de tan muslo o costilla viejos mi pecho
y su imaginada añoranza mejilla en tu cuello
sabiéndote en tu cuerpo exiliada del frío.

Blancos

Sobre las fresas de mi dolor lamo
la solitaria pantalla de mis dientes
donde probaba los textos de cal para ti.
El tablero de tu pasión y mi nostalgia.
La espuma de mar de tu compañía.
El blanco de la nieve de tu país natal.