domingo, 28 de septiembre de 2014

Aumentaba el número de los que apostaban que no ocurriría. El potencial de beneficios atrajo la elaboración de infraestructuras, de economías secundarias (apuestas parciales, interinas, sobre el proceso y luego terciarias, fraccionarias, la matemática se diversificaba en la colonización de apuestas). Los discursos, interesados o no, proliferaban a su vez: la mayoría venían con sus elucubraciones a dibujar el suceso cada vez más complejo y difícil, otros parecían explicarlo con una clarividencia que hacía crecer el valor de las apuestas.