jueves, 30 de enero de 2014

El ser huye

Este no es este momento:
este es el momento en que pensé en ti,
en el que con todas mis fuerzas pensé en ti.
No es el momento en el que reúno algunas palabras
y me interrogo una vez más sobre su eficacia:
es el momento en el que siento pasiones con tu nombre
que nunca terminaré de comprender, porque tu nombre
le pertenece a él, cuyas causas son tan hermosas.
No es el momento en que renuncio:
es el momento en el que quiero,
en el que sueño, desprendido de mi obsesión,
que te apoderes de él, de mi sueño, de mi querer,
y lo entregues a quien sea que domina los nombres.