lunes, 2 de mayo de 2011

Vuelta atrapado por un remanso de paz.
Y yo quisiera librarme, con mis versos
y mis brazos, guerras. Y tú
me lo impide con tu mirada tranquila.
Tranquila. Hoy lloverás
para mí.

1 comentario:

Salomé dijo...

Ten cuidado con las tormentas porque a veces lo inundan todo y el agua llega hasta el cuello.