jueves, 30 de junio de 2011

De ti bebo los sueños que respiro.
En ti miro la espalda en que me ahogo.
Pago el sentido y lo que debo
queda debido y rescindido.
Nunca debí soñar contigo.
Nunca debí nacer sino este día
en que has tasado el precio de la lluvia
y has llenado de espaldas la mirada.

1 comentario:

Pequeña Rock and Roll dijo...

perfecto,
este es
sencillamente
perfecto.