viernes, 30 de noviembre de 2012

Sorprendieron a los rumores en medio de la compraventa. Desde entonces los rumores corren y las monedas callan.

1 comentario:

Abraham dijo...

Dame tú mil besos y luego ciento.
Y así maldigo envidioso las palabras
del otro, y hago de mí severo anciano
por más que me crea en mi derecho
directo momento.