miércoles, 13 de febrero de 2013

Confesión sincera número I

Llevo casi una semana sin escribir
como quisiera. Curiosamente, encuentro
agarrotado mi brazo de escritura y dolorido.
No puedo dejar de establecer una sensación de causa
en la paradoja de este evento (ya conocen
supongo mi invariable fe en la paradoja).
Y además, me enfadaría bastante si no
consideraran importante esta situación más allá
de mi interés, mi orgullo y mi momento;
aunque nunca nunca llegara a enterarme.
(Ah, y aclaro todavía que nada de este acto
me está sirviendo de alivio)

No hay comentarios: