sábado, 23 de mayo de 2015

El tiempo se pierde

Insisto (no sé por qué, qué me lleva a pensar
que no está claro, que no fue comprensible): odio
el repertorio de individuos que fui sin conocerte,
incapaz de imaginar que eras como eres;
odio el otro repertorio que no te recuerda
cuando imagina que no serás como eres
o no te imagina en absoluto, que es de todos
los yos el más deleznable (y junto al cual,
sin embargo, también permaneces). Odio,
mientras tú estás aquí, amando, sin saber
muy bien cómo, este que se entrega.

1 comentario:

Arya dijo...

Y con el tiempo fuimos
un poco mas nosotros
un poco menos distantes...

Tiernos,
mios,
posandose en tu frente.